jueves, febrero 10, 2005

Entre dos aguas

Después de una noche de mucho pensar y de poner mis ideas en orden, se ha definido claramente lo que siento por estas dos chicas que llevan formando parte de mi alma algún tiempo.
Mi amiga del alma, de la cual tenía miedo a enamorarme, por fin he descubierto que es solo eso: una amiga. Ahora, eso sí, no es una amiga corriente. Es una amiga muy muy muy especial. Como la que nunca hubiera deseado encontrar.
La otra persona... forma parte de un sueño que tuve al empezar el año. Un sueño que no he llegado a olvidar todavía porque, simplemente, no puedo. La quiero, pero no se si ella siquiera sentirá algo hacia mí. Sólo el tiempo lo dirá...

Actualización a las 14:46: Como dijo Calderón de la Barca, "Los sueños, sueños son..."

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Hola, creo que soy la chica de la que hablas. Nunca tuve claro mis sentimientos hacia ti, pero ahora al ver que puedo perderte me he dado cuenta de que siento algo muy hermoso por ti. No se si es buen momento para decírtelo, lo siento, pero necesitaba sincerarme. No se si tu sentirás lo mismo por mi, pero hagas lo que hagas, seguro que decidirás lo mejor aunque me duela.

Besitos.

EOWIN

yanfer dijo...

Estaré esperándote con los brazos abiertos.
Un mensaje, una llamada, una conversación por messenger; cualquier cosa sirve para empezar la conversación que puede cambiar el rumbo de nuestras vidas.
Tan sólo dí que eres tú. Y que los sentimientos sigan su camino.

ZilC dijo...

Bonitos sentimientos. Me gusta que lo puedas (y quieras) compartir con nosotros.

Me encanta ver como los sentimientos fluyen.

Y..., es curioso ver como hay gente que firma como Anónimo, con comentarios que pueden llegar a la persona, y no tiene ni la decencia de escribir su nombre real o un pseudónimo que le identifique.

Anónimo dijo...

lo suponia... nisiquiera sabes quien soy, ¿verdad? .Es lo que pasa cuando vas detras de todas...

Me he llevado una gran decepción.

EOWIN

yanfer dijo...

Eowin, si de verdad quieres sincerarte no uses un blog, donde cualquiera podría intentar gastarme una broma que destrozara mis sentimientos (no sería la primera vez).

Ahora mismo estoy en una situación muy delicada de estado de ánimo y no soportaría otra broma.

¿Por qué no comentarmelo a mi directamente en lugar de intentar hablar bajo un pseudónimo? ¿Tienes miedo de mí?

Si no me preguntas nunca tendrás una respuesta. Y la ausencia de respuesta puede resultar ser en tu corazón mucho peor que un "no" y eso también lo sé por experiencia.

En tus manos queda.